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CASA DE LA SENYORETA JOSEFINA
Comenzamos la rehabilitación de uno de los edificios más emblemáticos en el centro histórico de Jávea. El emplazamiento está afectado por la normativa de protección del patrimonio.
El edificio en cuestión es un cuerpo casi exento, adosado a medianera únicamente por la parte norte, con forma alargada en sentido norte sur.
Es la conocida localmente como “Casa roja”, e históricamente como “Casa de la Senyoreta Josefina”, o también “Casa Català-d’Arnauda”.
Esta familia habría sido parte del grupo social favorecido por el comercio de exportación de la uva pasa, que fue el principal motor económico en la comarca durante el siglo XIX. Forma parte de la silueta reconocible del centro del municipio, tanto por su imagen de fachada como por la torre que se sitúa en el centro de la parcela. El torreón configura el miramar desde el que avistar la llegada al puerto de los barcos del co- mercio de este alimento. En realidad, todo el edificio está adaptado funcionalmente a este negocio, a modo de vivienda-almacén de distribución.
La planta primera es la planta noble, con los acabados propios de la clase social alta de la época (baldosa hidráulica en forma de cenefas o mosaicos en el pavimento y papel pintado en paredes). En esta planta se desarrolla la vivienda y los espacios de relación social con visitantes.
Interior de una de las estancias de la planta primera.
La planta segunda es un espacio de almacén, con mayor altura que una tradicional cambra y sin revestimiento en suelo ni paredes. Se aprecian incluso los soportes para baldas en algunas zonas.
Interior del almacén de planta segunda.
Desde este almacén se tiene el acceso al torreón miramar y a la zona de cubierta transita- ble, objeto de este informe.
Es conocido que el proceso de elaboración de la pasa por entonces, requería de fases de exposición al sol y de protección de la misma durante las horas de noche, frente a la hu- medad relativa alta que en esta comarca genera la proximidad al mar.
Escalera de acceso desde el almacén al torreón miramar.
El edificio ha sufrido una modificación importante con la habilitación de su planta baja como sucursal bancaria. Esta modificación ha afectado a la estructura portante del edificio. Donde supuestamente había muro de carga originalmente existe hoy una línea de pilares.
Esta zona de la planta baja no forma parte de la propiedad del inmueble objeto de este proyecto. No obstante, en el examen visual no se han detectado patologías que pudieran tener relación con esta.
El estado de conservación por tanto es bueno, teniendo en cuenta la antigüedad del conjunto del edificio.
Durante el año 2018 se ha redactado proyecto de rehabilitación de la vivienda actual. Y con este proyecto se ha obtenido la autorización correspondiente de la Conselleria de Patrimonio en materia de protección del patrimonio cultural, por encontrarse el edificio en el entorno de protección de la iglesia fortaleza de San Bartolomé. Asimismo se ha obtenido también licencia municipal del Ayuntamiento de Jávea.
