Una vivienda de los años 70 que requería una reforma integral para adaptar las necesidades contemporáneas de la actualidad, sin perder la esencia de una vivienda mediterránea. El proyecto consiste en una reforma integral, con una generación de nueva distribución y una ampliación para albergar el dormitorio principal y el despacho con vistas a la montaña.
CONEXIÓN DE VIVIENDA CON EL JARDÍN
Uno de los mayores inconvenientes que nos encontramos a la hora de realizar este proyecto era la falta de conexión de la vivienda con la parcela. La solución adoptada fue la construcción de una terraza y piscina elevada, de modo que la trasición interior-exterior sea lo más cómoda posible.
La iluminación de la parcela es otro elemento fundamental a la hora de proyectar y de forma indirecta.
Es aquel jardín que goza de poco mantenimiento y riego, con una variedad de árboles y vegetación autóctona, un concepto contrario a un jardín artificial. Lo que buscamos en este proyecto es tener la sensación de estar inmersos en un trozo de bosque, del que poder disfrutar desde una cierta altura, estando elevados del nivel del suelo, como la "casa del árbol".
INTERVENCIÓN MÍNIMA EN EL EXTERIOR. EL BOSQUE
Nos enamoró esta parcela y no quisimos borrar esta imágen, sino intervenir lo menos posible en el jardín respetando la naturaleza. Un exterior rodeado de naturaleza, dominado por el verde del mediterráneo.
Se ha diseñado una piscina que reinterpreta la balsa tradicional mediterránea, con un aspecto más contemporáneo, escondida en un trozo de bosque en las faldas del Montgó.
MADERA IPE
Optamos por la madera IPE para la terraza, considerada una de las mejores maderas tropicales para el exterior debido a sus propiedades y características. Presenta una alta densidad y concentración de taninos que la impiden flotar en el agua. La madera IPE puede resultar difícil de trabajar, sin embargo tiene un excelente comportamiento frente al fuego, gran durabilidad y alta resistencia.
Partimos de un espacio con falta de conexión entre las distintas estancias para crear un espacio donde todo fluye.
La vivienda ha sido diseñada únicamente con materiales naturales, locales, sostenibles y nobles. Lejos de todo tipo de imitaciones. El suelo interior es de mármol y las paredes están enlucidas con mortero natural transpirable. Los baños están revestidos con azulejos manuales.
La conexión con el Montgó es fundamental. Sentir la protección de una montaña llena de vida y de color.
ESCALERA EMPOTRADA MINIMALISTA
Una escalera moderna que contrasta con el estilo tradicional mediterráneo, reflejando un claro contraste entre lo nuevo y lo antigüo.
LA NAYA