Una vez más nuestro objetivo alcanzado en este proyecto. Una arquitectura de bajo consumo energético. Orientación sur, evitando el sobrecalentamiento en verano con un sencillo sistema de protección solar exterior, utilizando el sol como fuente de calor gratuita combinando captación solar directa y masa térmica, y por otro lado, el paisaje como fuente de refrigeración gratuita.
La arquitectura puede combinar perfectamente la tradición, la innovación y el buen resultado. Este proyecto responde a la estética residencial que predomina en Jávea, con los característicos arcos rebajados en la piedra tosca local que generan un espacio de porche entre la zona de jardín y la vivienda.
Para conseguir este éxito solo ha hecho falta aplicar las normas que la tradición cultural nos muestra sin perder de vista las tecnologías disponibles hoy en día. Los conceptos son simples, pero muy importantes.