El estudio fundado en 1988 por los arquitectos Aranda, Pigem y Vilalta ha sido el galardonado este año con el premio Pritzker, uno de los más renombrados internacionalmente en la Arquitectura. Se suman así al anterior arquitecto español premiado, Rafael Moneo, que lo recibiera en 1996.
Comenzamos esta categoría de nuestro blog con esta reseña, porque admiramos muchos proyectos de RCR desde hace años. El valor que para nosotros destaca en sus obras es su autonomía y valentía conceptual, el no sumarse a modas o corrientes fáciles manteniendo una coherencia de proyecto que da resultados contundentes.
Contundente es elegir un material como el acero o la piedra para un proyecto y hacerlo hasta las últimas consecuencias, o decidir que un proyecto debe jugar con las transparencias y explorar en el la multitud de opciones que puede ofrecer el vidrio.
RCR, en su devoción por la cultura japonesa, y en diálogo con sus raíces mediterráneas y locales, se mantienen fieles a las características de los materiales constructivos. La pureza de concepto en sus proyectos es llevada al extremo en muchas ocasiones, con resultados coherentes y rotundos a la vez que sensibles.
Nosotros tuvimos el placer de visitar varias de sus obras, en Olot (Girona) en 2013. Incluso el Hotel Les Cols, que crea un entorno casi metafísico. Un hotel con vistas al cielo, pero sin lujos extravagantes, en el que pasar un día supone el reencuentro con uno mismo. Un verdadero mundo aparte, que bien podría definirse como un trozo de mundo auténtico.
Sirine Ghadban